Elección del diseño: Reflexiona bien sobre el diseño que deseas. Consulta con un artista de Say Studio para explorar ideas y asegurarte de que el diseño sea significativo para ti. Ubicación del tatuaje: Decide en qué parte del cuerpo quieres tu tatuaje. Considera factores como la visibilidad, el tamaño y la comodidad según tus necesidades.
Investigación del tatuador: Escoge un tatuador experimentado y con buena reputación. En Say Studio, puedes revisar los portafolios de nuestros artistas y leer las opiniones de otros clientes para asegurarte de estar en buenas manos.
Higiene y seguridad: Asegúrate de que el estudio cumpla con los estándares más altos de higiene y seguridad. En Say Studio, utilizamos equipo esterilizado y desechable para garantizar tu bienestar.
Alergias y condiciones médicas: Informa a tu tatuador sobre cualquier alergia o condición médica que tengas antes de comenzar. Esto es crucial para evitar reacciones adversas.
Dolor y tolerancia: El proceso puede causar molestias, pero la intensidad varía entre personas. Muchos clientes en Say Studio encuentran el proceso tolerable e incluso relajante.
Cuidado posterior: Escucha con atención las instrucciones del tatuador para el cuidado del tatuaje, como mantener la zona limpia, evitar el sol y aplicar productos recomendados.
Compromiso a largo plazo: Los tatuajes son permanentes. Piensa bien en el diseño y asegúrate de que sea algo que te represente a largo plazo.
Costo: El precio depende del tamaño y la complejidad del diseño. En Say Studio, nos enfocamos en ofrecer un equilibrio entre calidad y accesibilidad.
Expectativas realistas: Recuerda que un tatuaje puede tardar en curarse y asentarse completamente. La paciencia es parte del proceso.